31. For Sale

En 2003 mi abuela me dijo por primera vez que debía cambiar de vida. Lo intenté. Dejé el Sunlight Cafe y comencé a dar clases de inglés a chicos hispanos en una asociación local de apoyo a inmigrantes. Eso era por las mañanas. Por las tardes trabajaba en una tienda de cosmética natural que está en Roosevelt. También alquilé una casa en Ravenna, para estar cerca de mi abuela.
Dos años después la asociación se quedó sin fondos y canceló las clases. Como necesitaba otro trabajo hablé con Jake, que entonces trabajaba en un bufete de abogados. Él me puso en contacto con uno de sus clientes. Tenía una agencia inmobiliaria. Llegamos a un acuerdo y me convertí en vendedora de casas. A tiempo completo.
Durante aquellos años casi no hice fotos de casas. Las veía todos los días en los anuncios de la oficina.

Cuando empezó la recesión económica la venta de casas se paró. La agencia siguió adelante un tiempo y en 2010 tuvo que cerrar. Ese año no encontré trabajo. Pero el año siguiente Jake me salvó de nuevo. Abrió su propio bufete y me contrató de secretaria. Me convertí en su mano derecha.


Viernes, 27 de marzo de 2015